Resumen | El estrés no sólo hace que las personas se sientan incómodas. Además, estimula nuestra necesidad de “huir de” o “luchar contra” aquello que nos lo provoca. Lo último que quieres para tu proyecto es tener un diseño web que estrese a tus visitantes y ofrezca una experiencia de usuario negativa que les haga abandonarla. Hay muchas cosas que pueden provocar esa respuesta en los usuarios de tu web, incluido el diseño. Intentaré explicar brevemente por qué queremos evitar esto.

El estrés es desagradable, aunque muchas personas tenemos que lidiar con él más de lo que deseamos. En el trabajo, en el colegio, en casa, con nuestras relaciones personales e, incluso, las noticias que recibimos de lo que pasa en otros lugares del mundo pueden provocarnos sentimientos de pánico, inquietud y ansiedad. Esas sensaciones son conocidas como ‘estresores crónicos’ por ser más habituales. Pero no son las únicas. Piensa en esas pequeñas señales de hastío o huida que, constantemente y a diario, envía tu cerebro ante situaciones como atascos de tráfico, la llamada de la compañía telefónica a la hora de comer, una visita no esperada en casa y que se prolonga demasiado mientras tienes otros asuntos pendientes…

Pues bien. Un sitio web con una experiencia de usuario pésima puede provocar sensaciones similares. Y, créeme, lo último que deseas es que alguien que visite tu página en Internet y sienta que:

• Necesita esforzarse para abrirse camino a través de ella, o
• Sale nada más entrar y nunca vuelve

Hay una enorme variedad de formas con las que un sitio web puede estresar y generar en los visitantes una incómoda respuesta cerebral de huida o lucha: tiempos de carga lentos, información abrumadora, excesivos errores 404… Todo eso que como usuario tú también has encontrado. Tanto la información mal estructurada como el diseño web pueden ser un enorme problema para tu negocio.

Y en algunos casos el diagnóstico es fácil: si hiciste tu web hace más de seis años y aún no has cambiado nada, seguramente estás estresando a tus usuarios. ¡Internet y el diseño web han cambiado mucho desde entonces! 

Por lo demás, si tus tasas de rebote son altas y el rendimiento no es un problema, entonces debes analizar el diseño de tu página. 

¿Necesitas ayuda? 😉